Según al informe Epidemiológico, emitido por el MINSAL, correspondiente a la semana 28, periodo comprendido entre el 08 al 14 de julio de 2018 se analizaron 2.045 muestras para virus respiratorios, de las cuales 1.131 resultaron positivas alcanzando el 55, 3%.
Del total anterior, el Virus Respiratorio Sincicial (VSR) llega a 763 casos; Influenza A, 194; Parainfluenza, 63; Metapneumovirus, 53; Adenovirus, 38; e Influenza B a 20 casos.
La mayor parte de las muestras recolectadas provienen de pacientes menores de 5 años de edad a los que en el momento de la hospitalización, se les realiza el panel de virus respiratorios. Del total de los casos estudiados, el 38,9% correspondió al grupo de menores de 1 año y el 25,7% al grupo de 1 a 4 años.
De los 1.131 casos positivos, VRS es el detectado con mayor frecuencia (67,5%), afectando al grupo de menos de 1 año. Luego se presentan casos de Influenza A (17,1%), Parainfluenza (5,6%), Metapneumovirus (4,7%), Adenovirus (3,4%) e Influenza B (1,8%).
Virus Respiratorio Sincicial (VSR)
Es el principal responsable de las infecciones respiratorias en niños y bebés.
Es muy contagioso y se transmite principalmente a través de las secreciones respiratorias por vía aérea (tos, estornudos…) y superficies contaminadas.
Puede causar infecciones graves en los pulmones, incluidas la bronquiolitis (infección de las vías respiratorias pequeñas de los pulmones) y la neumonía (infección de los pulmones).
Síntomas: Falta de apetito; irritabilidad e insomnio; fiebre (aunque sea baja); decaimiento; piel azulada; tos excesiva; falta de oxígeno.
Grupos de riesgo: bebés prematuros; adultos mayores, especialmente los de 65 años de edad o más; personas con enfermedad pulmonar crónica o problemas cardiacos; personas con el sistema inmunitario debilitado, como las que tienen la infección por el VIH, las que han recibido trasplantes de órganos o ciertos tratamientos médicos como quimioterapia.
Cómo prevenirlo: Lavarse las manos con agua y jabón varias veces al día; evitar tocarse los ojos, la nariz y la boca con las manos sucias; evitar el contacto cercano (besos, abrazos y compartir vasos) con las personas enfermas; limpiar y desinfectar frecuentemente las superficies y objetos a manipular; cubrirse la nariz y la boca al toser y estornudar.