Según cifras de la Organización Panamericana de la Salud, OPS, en Chile se diagnostican 30 mil nuevos casos de cáncer al año. De este total, cerca de 20 mil ingresan a programas de Cuidados Paliativos, tratamientos que están dirigidos a pacientes con enfermedades progresivas no tratables y que son mortales. Así lo explica el Dr. Daniel Leiva, jefe de la Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital San Juan de Dios.
“El objetivo de los cuidados paliativos es brindar un apoyo completo -tanto al paciente como a la familia- para mejorar la calidad de vida durante la enfermedad, tratando todos los síntomas que pueden afectar su condición: dolor, miedo, ansiedad, náuseas, vómitos, insomnio… Todo lo que deteriora la calidad de vida. Los cuidados paliativos comienzan desde el momento del diagnóstico de cáncer donde se presentan síntomas que deterioran la calidad de vida de los pacientes, independiente de si es curable o no”.
El profesional explica que actualmente en nuestro país esta modalidad terapéutica trata solo enfermedades oncológicas, pero existen otras patologías mortales y progresivas que aún no están cubiertas. “Según las estimaciones que tenemos, de las personas que requiere cuidados paliativos, el 50% son oncológicos y el restante está sin tratamiento, estamos hablando de los pacientes cirróticos, de los EPOC terminales, de las demencias, entre otros, pero se está trabajando para incluirlas”, asegura.
Agrega que estudios realizados tanto en Chile como a nivel internacional, avalan que el ingreso precoz de los pacientes a estos tratamientos mejora considerablemente la sobrevida, llegando a un promedio de seis meses. “Un paciente que está sin dolor, que tienen sus necesidades cubiertas y que tiene su red de apoyo vive más. El dolor es un desgaste enorme, entonces un paciente con dolor no controlado vive menos. Hemos visto que el ingreso precoz mejora no solo la calidad de vida, sino que también la sobrevida. Un paciente con cuidados paliativos vive más y vive mejor. Tenemos un promedio de 180 días de sobrevida de los pacientes, los que se han ido alargando en la medida que los pacientes llegan con un cáncer más precoz, la sobrevida se va extendiendo”.
Este 10 de octubre se celebra el Día Mundial de los Cuidados Paliativos, que busca concientizar sobre la importancia de esta área terapéutica. “Independiente de la enfermedad, de la progresión de la misma y que desde el punto de vista médico no haya tratamiento para curarla, no significa que los pacientes queden abandonados, muy por el contrario, tenemos la convicción de que logramos dar una buena calidad de vida a los pacientes y familia y que acepten la muerte como parte del proceso de la vida”, afirma el especialista.
Cuidados paliativos en el HSJD
El equipo que lidera el Dr. Daniel Leiva en el Hospital San Juan de Dios recibe cada año un promedio de 800 pacientes nuevos, mientras que cerca de 400 acuden mensualmente a sus respectivos controles. “Contamos con un equipo multidisciplinario -conformado por dos médicos, dos enfermeras, un psicólogo y un administrativo-, porque la unidad a tratar es el paciente y la familia. Entendemos que es la familia la principal red de apoyo, por eso vienen hijos, papás y nietos. No solo damos medicamentos, también oxígeno e insumos, los orientamos también en el aspecto social, para ver el tema de las pensiones y jubilaciones y nos coordinamos con los consultorios de la red Occidente, para que puedan visitarlos en sus casas”.
El Dr. Leiva añade que espera que con la promulgación de la Ley Nacional del Cáncer, donde están incluidos los cuidados paliativos, “podamos ir cerrando las brechas en relación a los especialistas para mejorar aún más la atención que entregamos”, puntualiza.
